LEON J. SIMAR (1909-1983) – fue un músico, compositor y director de orquesta belga. Inició sus estudios musicales en el Conservatorio Real de Lieja en 1918.
En 1937 obtuvo el "Primer Gran Premio de Roma" y con ello una beca para realizar una prolongada visita cultural por los diferentes escenarios de Europa y conocer su música, incluyendo desde luego Roma, Italia, Francia, Austria, Grecia donde Simar podría apreciar de primera mano muchas de las grandes obras que construyeron a lo largo de los siglos la inmensa cultura europea.
El prestigio obtenido con el "Premio de Roma" le otorgó algún reconocimiento internacional y desde luego generó contactos con prácticamente todo el universo cultural de la Valonía. Varios escritores notables, particularmente en dialecto valon, escribieron obras de Teatro para las cuales Simar compuso la música. Para la época, profesor de armonía en el Conservatorio Real de Música de Lieja, también escribía la columna de crónica musical para el periódico local de Lieja.
Leon J. Simar ingresó a Colombia el 7 de febrero de 1949 y tan a gusto se sintió en esa tierra que se propuso no volver a salir de ella. No habría marcha atrás. A su llegada pronto se relaciona con personas vinculadas a la música como Antonio Maria Valencia y con prestantes miembros de la región como Alberto Carvajal Borrero, Alvaro Garcés Giraldo, Ernesto Gonzalez Piedrahita, quienes promueven mucho las artes y la cultura.
Recién llegado y aún sin dominar completamente el idioma, Antonio María Valencia, director del Conservatorio de Cali, lo vincula a esta institución como director de la Orquesta Sinfónica del Conservatorio, director de la Coral Palestrina y como profesor de una cantidad de cursos de esta Escuela de Música. Compone su "Divertimento” para orquesta, con el cual gana el Premio Fabricato, en el concurso musical patrocinado por esta empresa. Compone también "Sinfonía Breve" y otras obras más. Trabaja la parte musical de las publicaciones de la "Editorial Cantemos" organizadas por el sacerdote Darío Benítez Giraldo S.J.
Al mismo tiempo investiga sobre la fabricación de algunos instrumentos musicales y busca materiales sustitutos para facilitar su construcción local. Hace experimentos distorsionando sonidos de varios instrumentos explorando nuevas formas de expresión musical. Más adelante haría unos cuantos experimentos con música "concreta" y música electrónica. En 1954 es nombrado Director del Conservatorio de Música de Cali.
El 15 de julio de 1955 estrena su “Requiem Litúrgico” con la orquesta del Conservatorio y la Coral Palestrina, en remembranza del Maestro Antonio Maria Valencia, fallecido el 22 de julio de 1952.
Organiza en los meses de enero y febrero de 1956 un "Festival Mozart", para celebrar el II Centenario del natalicio de este compositor. Dirige varios conciertos con la Orquesta Sinfónica del Conservatorio de Cali.
En 1959 el Representante Estudiantil al Consejo Directivo de la Universidad del Valle propone que se vincule al León J. Simar para que hable de esta expresión artística a los estudiantes de arquitectura. Ya se encontraba allí el Maestro Enrique Buenaventura, hombre cumbre del teatro en Cali, enriqueciendo grandemente la visión cultural de los arquitectos de la época. Era el momento de hacer algo similar con la música.
Las directivas de la Universidad, en cabeza de su Rector Mario Carvajal, persona de especialísimos alcances culturales, inmediatamente acoge esta idea pues conoce y comprende la importancia de la obra de Simar y el amplio reconocimiento que recibe.
Al poco tiempo de la vinculación de Leon J. Simar, este ha fundado el Coro Magno y el Coro de Cámara, agrupaciones de voces mixtas que dirige por doce años y que hacen las delicias de los amantes de este género musical. Ahora la obra de Simar empieza a divulgarse naturalmente a través de los estudiantes y la participación de los coros en los eventos que la Universidad normalmente programa.
En 1963 estrena su obra "Requiem para Don Cualquiera" en el Teatro Municipal de Cali, en el III Festival Nacional de Arte. El mismo ha supervisado la construcción, con medios locales, de algunos de los instrumentos de percusión que se utilizaron en esa presentación.
La Universidad del Valle acoge la propuesta de Simar y otros colaboradores para crear un Departamento de Música, que se ocupe de la enseñanza de la música a nivel universitario. En 1971 se oficializa la creación de esta unidad académica, adscrita a la Facultad de Humanidades, Departamento del cual es director hasta su retiro de la Universidad en 1979.